Roma: Encender las luces de los Museos Vaticanos

Gianni se ha levantado cada día durante casi diez años para afrontar la gran tarea de abrir las 24 salas que se comunican entre sí como si fueran una sola dentro de los Museos Vaticanos.

Ahora acompáñalo cada mañana y déjate sorprender por algunas de las obras de arte más importantes del mundo.

Escucha el chirrido de las viejas cerraduras al «sujetar» las llaves de estas salas históricas que pasan de la oscuridad a la luz con solo pulsar un interruptor.

Visita y descubre los «tesoros» que esconden los Museos Vaticanos de una forma que nadie más puede ofrecerte.

Al recorrer esas salas, caminarás con Gianni mientras te cuenta «experiencias» e «historias» de las temporadas en las que fue jefe de los clavigeros, e incluso algunas bonitas «cuentos para dormir» de las aproximadamente 20 000 piezas que se pueden ver.

No solo se mostrarán los servicios con la mejor luz natural, sino también salas que normalmente no son accesibles al público.

Y cuando haya terminado la visita, podrá ir al Cortile della Pigna y desayunar al aire libre con croissants o pain au chocolat y tortitas con mantequilla de cacahuete o mermelada, zumo de naranja o manzana y té o café.