Durante una audiencia con los fieles, el Papa declaró que la resurrección de Cristo trajo esperanza a la oscuridad de la historia humana.

Durante una audiencia con los fieles, el Papa declaró que la resurrección de Cristo trajo esperanza a la oscuridad de la historia humana Durante una audiencia con los fieles, el Papa declaró que la resurrección de Cristo trajo esperanza a la oscuridad de la historia humana

«Incluso nuestro tiempo, marcado por tantas cruces, invoca el amanecer de la esperanza pascual», dijo el papa León XIV durante la audiencia general del miércoles 5 de noviembre en la plaza de San Pedro.

En su catequesis, el Papa reflexionó sobre la resurrección de Cristo como «no una idea, no una teoría, sino el acontecimiento que es el fundamento de la fe».

Hizo hincapié en que creer verdaderamente en la resurrección en nuestra vida cotidiana significa revolucionar nuestra forma de vivir. Esta transformación puede entonces ayudar a cambiar «el mundo con el poder suave y valiente de la esperanza cristiana».

«Podemos ser sus testigos incluso allí donde la historia humana no ve luz en el horizonte», instó el Papa. «La esperanza pascual no defrauda».

: El papa León XIV en la audiencia general (@Vatican Media) : El papa León XIV en la audiencia general (@Vatican Media)

La estrella polar en nuestras vidas caóticas

El Papa destacó cómo en la resurrección de Cristo «encontramos una respuesta a nuestra sed de sentido», especialmente cuando nos enfrentamos a situaciones que parecen incomprensibles.

«En Él, tenemos la seguridad de poder encontrar siempre la estrella polar hacia la que dirigir nuestras vidas aparentemente caóticas, marcadas por acontecimientos que a menudo parecen confusos, inaceptables e incomprensibles: el mal en sus múltiples formas, el sufrimiento, la muerte y los acontecimientos que nos afectan a todos y cada uno de nosotros», afirmó.

«Ante nuestra frágil humanidad», continuó el papa León XIV, la resurrección de Cristo «se convierte en cuidado y sanación, alimentando la esperanza frente a los desafíos aterradores que la vida nos presenta cada día a nivel personal y global».

La multitud en la Plaza de San Pedro durante la Audiencia General (@Vatican Media) La multitud en la Plaza de San Pedro durante la Audiencia General (@Vatican Media)

Explicó cómo, «en la perspectiva de la Pascua», el Vía Crucis se convierte en el Camino de la Luz. Instó a los fieles a «saborear y meditar sobre la alegría después del dolor, a recorrer con nueva luz todas las etapas que precedieron a la Resurrección».

El Papa subrayó cómo Jesús se presenta en el Libro del Apocalipsis (1, 17) como «el Viviente» para mostrar que su Resurrección es un hecho actual, visible en la vida cotidiana de cada persona.

La resurrección no es un acontecimiento lejano del pasado

La Pascua de Cristo «es un acontecimiento que no pertenece a un pasado lejano, ahora asentado en la tradición como tantos otros episodios de la historia humana», insistió el Papa. Señaló que la Iglesia enseña la necesidad de hacer un «recuerdo vivo» de la Resurrección celebrando la Pascua cada año y la Eucaristía cada día.

«El Misterio Pascual es la piedra angular de la vida cristiana, alrededor de la cual giran todos los demás acontecimientos», dijo, y añadió que «podemos decir, entonces, sin irenismo ni sentimentalismo, que todos los días son Pascua».

«Hora tras hora, vivimos tantas experiencias diferentes: dolor, sufrimiento y tristeza entrelazados con alegría, asombro y serenidad. Pero en cada situación, el corazón humano anhela la plenitud, una felicidad profunda», explicó el Papa.

El papa León durante la audiencia general en la plaza de San Pedro (@Vatican Media) El papa León durante la audiencia general en la plaza de San Pedro (@Vatican Media)

Para aclarar este concepto, citó a Santa Teresa Benedicta de la Cruz (Santa Edith Stein), quien «profundizó en el misterio de la persona humana», señalando que el «dinamismo» proviene de «la búsqueda constante de la plenitud».

Ella escribió que la persona humana «siempre anhela que se nos renueve el ser, para poder aprovechar lo que el momento nos da y, al mismo tiempo, nos quita».

«Estamos inmersos en la limitación, pero también nos esforzamos por superarla», dijo el Papa.

La resurrección es la noticia más hermosa

Ante esta realidad de la naturaleza humana, «el anuncio pascual es la noticia más hermosa, alegre y sobrecogedora que jamás haya resonado en toda la historia», continuó el Papa.

«Es el "Evangelio" por excelencia, que da testimonio de la victoria del amor sobre el pecado y de la vida sobre la muerte, y por eso es lo único capaz de satisfacer la exigencia de sentido que perturba nuestras mentes y nuestros corazones».

Los seres humanos se esfuerzan constantemente «por alcanzar un más allá que les atrae continuamente», destacó el papa León. «Ninguna realidad contingente nos satisface. Tendemos hacia lo infinito y lo eterno».

Sin embargo, subrayó, «esto contrasta con la experiencia de la muerte, anticipada por el sufrimiento, la pérdida y el fracaso», citando a San Francisco, quien dijo en el Cántico del Sol que «ningún hombre vivo puede escapar» de ella.

En conclusión, el Papa destacó que la Resurrección cambió el curso de la historia humana.

Cuando las mujeres fueron «al sepulcro para ungir el cuerpo del Señor», después de su crucifixión, y lo encontraron vacío, dijo, se encontraron en cambio con «el misterioso joven vestido de blanco», que les dijo: «Buscáis a Jesús de Nazaret, el que fue crucificado. Ha resucitado; no está aquí» (Mc 16, 6).

La multitud en la Plaza de San Pedro durante la Audiencia General (@Vatican Media) La multitud en la Plaza de San Pedro durante la Audiencia General (@Vatican Media)